miércoles, 23 de diciembre de 2015

Celebrar

Y llegó fin de año y las fiestas volando. ¿Qué mejor en estos días celebrar con literatura?

Elijo para esta ocasión tres libros para despedir el año:


La estrella de madera de Marcel Schwob  con ilustraciones de Alfredo Prior (Planta editora, 2009). Pequeña joya literaria de este escritor y traductor y las exquisitas ilustraciones de Prior, artista plástico argentino destacado. Bellísimo libro con final cruento donde un niño descubre las estrellas a partir de un claro en el bosque. Delicada descripción poética de los paisajes y espacios que recorre Alan, el niño del relato.



Ver llover de Germán Machado y Fernando de la Iglesia (Calibroscopio, 2010), hermoso libro de poesía donde la lluvia deviene palabra poética, juego del lenguaje, imagen viva. Dibujo, collage y un estilo Basquiat para pintar la lluvia y la percepción en torno a ella.

Foto extraída del blog de la autora: www.ximenagarcia.blogspot.com.ar

Para cuidarte mejor de Ximena García (Uranito, 2014). ¿Cómo contar otra versión de Caperucita Roja? Una madre sobreprotectora y una niña con ganas de jugar, de un poco de espontaneidad. Rojo y negro como dupla de color predominante, ilustraciones de inspiración naif, juegos tipográficos.



Felicidades para todxs y buen comienzo del 2016. Nos seguimos leyendo el año próximo. 

martes, 10 de noviembre de 2015

Un almanaque con mucha música



Desde tiempos inmemoriales los humanos regularon el tiempo con calendarios y, luego, almanaques. En ellos no solo se incluía el clima sino que, en algunos casos, también daban información sobre higiene, cuestiones astrológicas, pautas morales, etc. Los almanaques fueron considerados literatura de cordel porque estaban colgados de un hilo en distintos lugares. Hoy, en tiempos digitales, todavía podemos encontrar almanaques que cuelgan en negocios o en algunas casas.
¿Y cómo sería un Almanaque musical? ¿Se trata de regular el tiempo con música?

Almanaque musical (Kalandraka, 2012) de Antonio Rubio y David Pintor es un bello hallazgo poético.
Cada doble página presenta un mes del calendario acompañado de imágenes musicales o que remiten al universo musical y, cada mes está representado literariamente en versos que hacen referencia a la música y al clima. Así “Enero”, siguiendo el calendario en el hemisferio norte, nos trae “Violines y violas/esparcen sus notas/sobre el blanco enero/como blanda alfombra (…)”, en “Febrero” la orquesta se refugia y “contempla/los copos de nieve/ que a febrero acechan”, “Marzo” trae el viento y “Se forma un ballet/ de gorros aéreos,/como una bandada/ de pájaros nuevos.” Así, mes a mes, una poesía donde música, clima y belleza se aúnan para presentar, poéticamente, los distintos estados de ánimo y particularidades de cada estación.

Almanaque musical es un libro de poesía inusual donde la música no solo aparece tematizada sino que también estructura cada texto y está presente en cada ilustración por cada mes del año.

Para aquellas/os que nos gusta la música y la poesía, Almanaque musical de Antonio Rubio y David Pintor es una invitación a disfrutar de cada estación desde las páginas de este hermoso libro.     


jueves, 22 de octubre de 2015

Convocatoria interesante

Hola! Comparto información sobre una convocatoria para investigar en torno a la literatura para niñ@s

Concurso de becas de investigación "María Elena Walsh" 2015

Concurso de becas de investigación "María Elena Walsh"
Presentación: Con el objetivo de incentivar nuevos trabajos que utilicen los fondos patrimoniales de la institución, la Biblioteca Nacional invita a presentar proyectos orientados a investigar la literatura infantil y las representaciones de la infancia en publicaciones nacionales. Los trabajos podrán estar orientados a investigar representaciones de la infancia en publicaciones oficiales actuales o históricas, en publicaciones periódicas, en la literatura, el ensayo o en publicaciones científicas. Se incluyen asimismo en esta convocatoria proyectos que se propongan investigar la literatura infantil editada en Argentina, que tomen como referencia revistas y libros dirigidos específicamente a niños y niñas. También podrán participar de la convocatoria otros proyectos que vinculen el universo de la infancia con las colecciones de la Biblioteca Nacional.
Recepción de proyectos: del 20 al 30 de octubre de 2015
La presentación de las carpetas se realizará entre el 20 y el 30 de octubre de 2015, en el Área de Investigaciones Bibliohemerográficas (tercer piso) de la Biblioteca Nacional, en el horario de 11 a 13 hs. y de 15 a 18 hs.
Organiza: Biblioteca Nacional Mariano Moreno (Agüero 2502, CABA).
Mail de contacto: becas_bn@yahoo.com.ar
Mas información aquí: http://www.bn.gov.ar/convocatoria/concurso-de-becas-de-investigacion-maria-elena-walsh-2015

martes, 13 de octubre de 2015

Una bañera maravillosa

Hay niñ@s que disfrutan del baño y otr@s que no les gusta bañarse, están aquell@s que disfrutan de chapotear y jugar en la bañera y aquell@s que si pueden evitarlo hacen todo lo posible para hacerlo. Hay niñ@s que inventan un mundo en el agua y aquell@s que escapan como si de la peste se tratara.


¡Hay un hipopótamo en la bañera! (Lata de Sal, 2013) de Kyoko Matsuoka con ilustraciones de Akiko Hayashi relata la historia de un niño que disfruta de bañarse, que inventa un universo imaginario a partir de la escena cotidiana de darse un baño con su pato Pukka.

Un día, Makko, se metió en la bañera, estuvo un rato y luego salió de la bañera para lavarse bien. Fue en ese momento que Pukka le avisó: ¡-Makko, en el fondo de la bañera hay una tortuga gigante!” A partir de la aparición de la tortuga y su charla con Makko sobre la temperatura del agua y la creencia de que estaba en el mar, la bañera se transforma en un universo acuático donde los animales más inesperados van surgiendo del agua. Pingüinos, una foca, un hipopótamo, una ballena…
Una bañera y un mundo imaginario frondoso donde solo los niños, Makko y Pukka, pueden ver la fantasía.

Las ilustraciones de Akiko Hayashi nos trasladan a un mundo donde, página a página, las imágenes de vapor, agua y ensueño, nos llevan a conocer animales acuáticos que comparten la bañera con Makko y Pukka.


Bello libro donde el baño es el lugar del juego, la imaginación y lo posible. Un viaje a la infancia donde todo está por inventarse.   

martes, 6 de octubre de 2015

La historia de Erika o cómo sobrevivir en tiempos turbulentos

En los últimos tiempos, la crisis humanitaria producto de la migración masiva de niños, niñas, jóvenes, adultos, ancianos  refugiados de las guerras y el hambre, que buscan un lugar para vivir y tener un futuro, nos conmovió desde las redes sociales, la televisión y los diarios. ¿Qué estamos dispuestos/as a hacer para sobrevivir? Ver escenas tremendas como personas que huyen con solo una bolsa, mujeres y varones que llevan a sus niñ@s en brazos, jóvenes que solo tienen su esperanza nos deja consternados/as. Y la irremediable muerte de niñ@s con su obscena transmisión en cadena nos deja sin palabras.



En otros tiempos, no tan lejanos, también hubo niños, niñas, mujeres, varones, ancianos que buscaban sobrevivir a la persecución religiosa y política como sucedió en Europa durante el nazismo. La historia de Erika de Ruth Vander Zee y Roberto Innocenti (Kalandraka, 2007) relata una historia de huída y supervivencia durante el nazismo.

Ya desde la portada nos trasladamos a esa época, gracias a las ilustraciones color sepia e hiperrealistas de Innocenti y, en esta edición, el troquelado de una estrella en el centro de la portada que, si la retiramos, brilla en su amarillo acusador: la estrella que debían llevar los judíos durante el nazismo.


Al inicio del texto, la autora cuenta cómo nació este libro a partir de la historia real de Erika, sobreviviente del Holocausto, que le narró su historia.

La historia de Erika cuenta en primera persona el relato de una niña que sobrevive gracias a que su madre la arroja desde un tren que va hacia un campo de exterminio. Las ilustraciones de Innocenti son en sepia, como viejas fotografías de época o escenas de una película, donde el color solo se hace presente en la estrella amarilla, la manta rosa de la bebé y, recién al final, cuando la vida triunfa a la muerte. Erika vive para contar su historia pero no conoce su identidad, tal como se refleja en el texto donde no conocemos la cara de la niña.

La historia de Erika es un libro conmovedor, terrible que vale la pena compartir con niños y niñas para mantener viva la memoria.  



lunes, 28 de septiembre de 2015

Libros del mundo VIII: desde París en inglés




En la orilla izquierda de Paris, en el Quartier Latin, se encuentra una librería histórica y famosa mundialmente. Se trata de Shakespeare & Company, librería fundada por Sylvia Beach que fue cerrada en 1941 por los nazis y se convirtió en un punto de encuentro de escritores y escritoras como Hemingway o Scott Fitzgerald. En 1951 fue reabierta por George Whitman y hoy está a cargo de su hija Sylvia Beach Whitman.

En esa librería se pueden comprar libros en inglés, nuevos y usados. Por la noche, en los sofás pueden dormir escritores a cambio de ordenar sus estanterías y los lunes, generalmente, hay lecturas de escritores/as noveles y también se organizan talleres y festivales literarios.

Mi amiga Natalia estuvo de paseo por Paris y, como no podía ser de otra manera, trajo un libro bajo el brazo para mí. Se trata The new jumper (Harper Collins Publishers Ltd, 2012) de Oliver Jeffers de la serie The Hueys.


Como cuenta la historia, los Hueys son muchos muchos, usan siempre lo mismo, piensan lo mismo y hacen las mismas cosas hasta que un día Rupert, uno de ellos, decide tejer un nuevo sweter. Y, a partir de allí, las cosas ya no son como antes. Este texto de Oliver Jeffers problematiza la cuestión de la diferencia, de la alteridad. ¿Qué pasa cuando alguien es distinto? ¿Cómo es percibido por los otros? ¿Qué sucede cuando se piensa diferente? ¿Es posible pertenecer a una comunidad?
Gillespie, otro de los Huey, piensa que ser diferente es interesante y decide también hacerse un sweter. Ahora son dos los que son diferentes. Y, de a poco, lo diferente empieza a hacerse norma…y eso cambia todo.

The new jumper narra una historia sencilla que interpela a lxs lectorxs y nos deja pensando.

lunes, 7 de septiembre de 2015

Palabras de papel

Siempre me apasionaron los libros que hablan de la literatura, de leer, del mundo de papel y palabras que es todo libro. 


Hojas sobre la almohada (Abran cancha, 2014) de Natalia Méndez es un viaje a la poesía hecha de poesía, hecha de palabras, de papel de libro, de viaje literario hacia universos de ficción y lenguaje.
Este libro presenta poesías que son metapoesía para niñ@s, poesía que muestra cómo las palabras construyen mundos donde sus materiales son “palabra pájaro”, “palabras tambor”, “palabras respuesta”, “palabra color”, “palabras preguntas”.

Poemas que nos hablan de qué nos pasa cuando leemos, de cómo la literatura nos lleva a recorrer lugares extraños donde hay animales extraños “que toman el té con los vecinos” o donde hay magia pero “cuando buscás un truco/siempre te aparece otro” o bien un libro que “echó raíces en la tierra” y “en los frutos había/semillas/de nuevas historias”.

Poemas que nos hablan de la lectura como una experiencia transformadora y que tiene su propio ritmo y cadencia. Así una pausa en la lectura es “como un panadero/que pasa/flotando” y la vida en la biblioteca es la oportunidad para los libros de contarse historias. A veces el sueño conjura contra la posibilidad de seguir leyendo, uno quiere seguir pero no puede porque “la última palabra/que leo/ por la noche/es la puerta de entrada/a los sueños”. Los libros son un universo en sí mismos y pueden hacer cosas muy singulares como “cantar”, “guardar un secreto” o “se dejan acariciar”.

Poemas que son deseos de más historias, más libros y mucha lectura para esta vida.

¿Quién no quiso alguna vez llegar al final de una historia y volver a empezar? Este libro nos invita a volver una y otra vez, a leerlo y releerlo para seguir disfrutando de poesía que nos habla de poesía y de literatura. Y cada vez que lo abrimos, las ilustraciones de Fernando Calvi nos llevan a un universo donde lo abstracto y lo realista se combinan para trasladarnos, también, a otros mundos posibles de color pleno y estridente. 

Hojas en la almohada es un libro para atesorar y leer cuando parece que no hay más literatura que nos pueda transportar hacia otro lugar. Ese lugar que no es otro que el de la buena literatura.   

viernes, 28 de agosto de 2015

Segunda entrega: de viaje por Valparaíso

Valparaíso es una ciudad marítima que se despliega entre los cerros y el mar. En el cerro Alegre, zona de calles empinadas y retorcidas, con casas de colores que nos hacen recordar a las de la Boca y a las casillas de chapa de Berisso y Ensenada pero con aires ingleses, se encuentra uno de los recorridos turísticos de la ciudad. Las paredes y muros están cubiertas con murales y graffitis como una gran galería de arte al aire libre. 





En un recodo de una calle que me lleva hacia algún lugar, descubro la librería Metales pesados –que ya había conocido en Santiago- y para mi sorpresa tiene un sector para niñxs bastante bien provisto.
En medio de tantos títulos para niñxs, encuentro un bello libro titulado Al vuelo de Isabel Hojas inspirado en la obra del pintor chileno Nemesio Antúnez editado por la editorial chilena Hueders Niños en 2014.  


La autora e ilustradora Isabel Hojas recreó e intervino la obra de este artista plástico chileno -nacido en 1918 y fallecido en 1993 que estudió en Francia, Estados Unidos y regresó a Santiago para pintar su tierra- en este libro de bellas imágenes en el que Nemesio es un niño distraído que vuela con su imaginación y viaja dentro de sus cuadros. Al final del libro podemos conocer más de la vida y obra de Nemesio Antúnez gracias a la inclusión de una biografía y de reproducciones de algunos de sus cuadros más famosos como “La medida del negro” (1976), “Volantines en Lo Curro” (1983) y “La sopa” (1951) entre otros.



Al vuelo es un bello libro que atesora hermosas imágenes que son poesía. 

lunes, 24 de agosto de 2015

Primera entrega: de viaje por Santiago de Chile

En estas vacaciones de invierno, estuve de viaje unos días en Chile – en Santiago y Valparaíso-. Como es habitual cuando viajo, las librerías siempre son un recorrido que no dejo de hacer. Santiago se caracteriza por ser una ciudad con muchas librerías, tanto de viejo como de libros nuevos.


Uno de los lugares que visité varias veces en Santiago es el Centro Cultural de La Moneda, justo debajo del Palacio de la Moneda, inaugurado por el ex presidente Lagos que hoy reúne no solo un museo de artes visuales sino también galerías, tiendas de artesanías, bares y la tienda del centro cultural donde no solo se pueden adquirir artesanías y obras de arte y diseño de autor sino también libros.

Revisando los libros expuestos, en un sector encontré libros para niñxs. Y allí, me sorprendí con La cenicienta de Gabriela Mistral con ilustraciones de Bernardita Ojeda y comentario crítico de Manuel Peña Muñoz, editado por la editorial chilena de libros para niñxs Amanuta en 2014. El texto de Mistral se publicó por primera vez en “Lecturas Dominicales” del diario El Tiempo de Bogotá en 1926.


Este libro es una nueva adaptación del clásico infantil, en base al cuento de Charles Perrault, donde la autora chilena despliega su poética recreando el relato tradicional en versos. Una característica de este texto es que, por un lado, narra la escena del baile en dos oportunidades; por otro lado, la descripción de los ambientes y los personajes es detallada y con elementos que remiten al contexto cultural chileno como, por ejemplo, en vez de oro y plata describe los tocadores como de “cobre y plata” o giros lingüísticos latinoamericanos –“¡Ay!, qué callada la noche/para oírse el corazón, /¡la Cenicienta que llora/apegadita al fogón!”, “del fogón iba a la puerta/empinadita del ansia”- o bien el uso de la metáfora como recurso retórico que le imprime al texto cierto misterio y, además, despliega múltiples sentidos –como, por ejemplo, “Y aquella misma mañana/desposó el príncipe Sol/ a María Cenicienta/veladora del tizón/hija de ninguna madre,/desnudita hija de Dios…”.
Las ilustraciones de Bernardita Ojeda de colores contrastantes y con una estética de cómic acompañan el relato en verso.

La Cenicienta de Gabriela Mistral es otra versión del clásico infantil que vale la pena conocer.




viernes, 7 de agosto de 2015

Cada loco con su tema

Desde tiempos inmemoriales los pueblos han inventado frases que, de algún modo, dan cuenta de comportamientos o modos de ser como son los refranes y proverbios. Se han ido transmitiendo de generación en generación, o de boca en boca, y hoy nos encontramos con algunos que todavía perviven y otros que, de a poco, han ido desapareciendo. Los refranes y proverbios forman parte, podríamos decir, del folclore infantil y están muy presentes en las poéticas de algunxs autorxs como, por ejemplo, Ricardo Mariño o Adela Basch.


Refranario. Campanario donde se tañen refranes de Flavia Tomaello (Abran Cancha, 2012) es un hermoso libro donde los refranes y proverbios se dan cita en versos y poesías. Como cuenta la autora “un día que no tenía nada que hacer, empecé  a jugar con las palabras, los refranes y los proverbios. Se me ocurrió pensar que era más fácil aprendérmelos si los convertía en pequeñas poesías”, así surgió este libro.

Página a página nos encontramos con poesías que llevan por título famosos proverbios y refranes como “A falta de pan, buenas son las tortas”, “A caballo regalado no se le miran los dientes”, “Cada loco con su tema”, “A quien le pique que se rasque”, entre muchos otros. Como un juego de lenguaje y de sentidos, la autora incluye -además de en el título- en los primeros versos el refrán o proverbio y a partir de ahí, a través de asociaciones semánticas o fónicas o relaciones de sentido disparatadas va configurando los poemas-refranes. 
Así, por ejemplo, “La mala noticia viene como saeta” juega con las asociaciones fónicas a partir del término “saeta” jugando con la rima y con la oposición entre buena y mala noticia: “La mala noticia viene como saeta./La buena, como carreta./ La mala corre carreras./La buena pasa por afuera./ La mala golpea la puerta. /La buena espera que esté abierta./Si querés huir de una mala,/azotala con una pala. /Si querés atrapar una buena,/preparale una rica cena.”

Las ilustarciones geométricas de Silvia Lenardón refuerzan el efecto humorístico de las poesías a partir de las escenas cómicas o irónicas que acompañan o dialogan con los textos.

Leer Refranario de Flavia Tomaello es otra forma de acercarse a la poesía, a los juegos del lenguaje, a los sentidos múltiples.E l espíritu de los refranes-poesías es mantener viva la memoria del folclore y acercarse al lenguaje y la palabra a través de lo lúdico y el juego.

Refranes como poesías, poesías como refranes, de eso se trata Refranario , un libro de poesías distinto, original y divertido.

¿Qué refranes conocen? Y ¿cuál es su preferido?


viernes, 17 de julio de 2015

Recorrido por la 25° Feria del Libro infantil y juvenil



Mañana con sol para enfrentar el frío e ir a visitar, otra vez, como todos los años, la Feria del libro infantil. Este año en dos lugares: Polo Circo y Tecnópolis. Elijo Polo Circo (Av. Juan de Garay 2200) no muy lejos de mi casa.


Llego y me sorprende gratamente la cantidad de micros escolares que hay estacionados sobre la avenida. Y, ya en la entrada, niños y niñas con sus maestras y maestros por entrar.


Ni bien entro a la carpa central donde están los estands de libros, encuentro las vitrinas con ediciones de distintas épocas y formatos rememorando los 150 años de Alicia en el país de las maravillas, uno de mis libros preferidos. Me acerco a las vitrinas y me sorprendo de las diversas ediciones que se exponen. Es un buen comienzo para el paseo.


Camino unos pasos y me choco con el estand de Colihue, que como siempre tiene ofertas de 3 libros por $110 o $125, dependiendo de la colección. Miro un poco y sigo el recorrido.
Este año me propuse comprar fundamentalmente textos de poesía, así que en cada estand busco un poco y no siempre tengo suerte.
Unos pasos más adelante, me detengo en Libros del Zorro Rojo y me deleito con sus ediciones cuidadas y exquisitas. Me quedo un rato mirando La biblioteca perdida  y Sueño de Murakami, las ediciones ilustradas de La Condesa Sangrienta de Alejandra Pizarnik y La metamorfosis de Kafka, entre otras.
Sigo caminando y veo a lo lejos el estand de Calibroscopio. Descubro El punto de Peter Reynolds perdido entre tantos otros libros. Miro a ver si hay algo de Jimmy Liao que no tenga, pero no tengo suerte, está Hermosa soledad pero por suerte ese ya lo tengo. Elijo de Ediciones Mágicas Naranjas tres hermosos libros a solo 68$ cada uno con el descuento para docentes: Variaciones de la luz de Diana Bellessi con ilustraciones de Pablo Ramírez Arnol, Noctilucas de Walter Cassara con imágenes de Hilda Fernández Oreiro y María Valeria Chinnici y Música amable al fin de Irene Gruss con ilustraciones de mi querida Cecilia Afonso Esteves. 
Sigo mirando y me tiento con ¿Dónde está mi zapato? del ilustrador y autor alemán Tomi Ungerer que con el descuento me sale $177.




A unos pocos pasos, me encuentro con el estand de Fondo de Cultura que en un minuto es invadido por niños y niñas que se tiran al piso a leer los libros que van eligiendo de los estantes. Es hermosa esa imagen de un estand pequeño tomado por las lecturas y lxs lectorxs. Ahí elijo tres libros de poesía: Huellas de pájaros de Ramón Iván Suárez Caamal con imágenes de Mauricio Gómez Morin, ganador del Premio Hispanoamericano de Poesía para niños 2010;  Un pajarillo que canta con versos de Ricardo Yáñez seleccionados e ilustrados por el pintor Carlos Pellicer López y, también del mismo artista plástico, elijo Este verde poema con versos de Aurelio Arturo. 


La búsqueda de poesía me lleva hacia el estand de Abran cancha y Ricerchail, donde elijo tres libros de poesía de la editorial de Adela Basch: Hojas sobre la almohada de Natalia Méndez, Refranario de Flavia Tomaello y La oveja imaginaria de Beatriz Actis –cada uno al módico precio de $52-.


Y para cerrar el paseo, me doy una vuelta por el estand de la Cámara del libro donde encuentro Las dos ventanas de Esteban Valentino y Marina Aizen de Libros del Eclipse a solo $95.
En medio de la caminata me cruzo con la Librería de las Luces donde descubro en un anaquel a solo $30 El topito Birolo y en la Librería El túnel libros de oferta donde se destacan historietas y clásicos infantiles.
Un paseo donde algunas editoriales multinacionales no están pero sí, por suerte, hay descuentos para docentes de entre el 15 y 20% y, sobre todo, a diferencia del espacio donde se realizó el año pasado, los posnet funcionan y hay calefacción –eso sí, un poco alta-.

Mucha poesía para leer estas vacaciones y, tal vez, con un poco de suerte, en las próximas semanas me gustaría darme una vuelta por Tecnópolis para ver qué otras sorpresas me esperan.


Espero que les haya gustado el recorrido y espero sus impresiones de esta nueva edición de la feria.  

miércoles, 15 de julio de 2015

Historias de miedo

A lo largo del tiempo, las historias de miedo fueron la forma que tuvieron los hombres y mujeres para conjurar los temores de cada época, la manera a través de la ficción de hablar de los miedos que los acechaban a la vuelta de la esquina. ¿Cómo dar cuenta de los miedos contemporáneos desde la literatura? ¿Qué historias contar para hablar de lo que nos pasa y nos aterroriza en la vida cotidiana?


Cuentos para temblar de Estela Smania (Comunicarte, 2014) con ilustraciones de Ana Luisa Stok se propone narrar historias que dan miedo, aterrorizan y, de algún modo, buscan relatar esos miedos que tenemos en la vida contemporánea de una manera nueva, original y poderosa.

Así, a medida que vamos recorriendo el libro, nos encontramos con historias que nos dejan sin aliento –reforzadas por las imágenes sugerentes en una paleta en contrapunto rojo y negro-, incómodas y que nos llevan a estar alertas. En este sentido, el epígrafe ya es una invitación a temblar: “Mientras lees, alguien está parado a tu lado”.  
Algunos de los cuentos incluidos en el libro son: “Más allá de las vías” relata la historia de un niño muerto y su doble, “El Talliem real” es la historia de un libro que su sola presencia hace temblar al narrador, el tema del doble y la muerte joven también aparece en “Juan Cruz le decían a Lito”, en “El revés de las cosas” Smania se anima a contar una historia con un padre desaparecido y “Mister Larsson” narra una historia real ficcionalizada donde la trata de niñas está como telón de fondo, entre otros relatos.

Cuentos para temblar es una buena oportunidad para ampliar el canon de textos de terror pero, en este caso, incluyendo temáticas que nos confrontan con la cruda realidad social.
Para conocer un poco más de la obra de esta poeta y narradora, pueden recorrer su página web: http://www.estelasmania.com.ar/

¿Qué otros cuentos de miedo los/as han dejado sin aliento?


lunes, 13 de julio de 2015

Un caballero para viajar a la imaginación

Releyendo la introducción del libro de Gabriela Larralde Los mundos posibles (Título, 2014) en el que aborda la literatura LGTBBI para niñxs, ella recuerda la lectura en su infancia de Historia de un primer fin de semana de Silvia Schujer, publicado por primera vez en 1991, donde podía reconocer su familia de padres separados en la familia de Violeta y Daniela. Una novela donde Schujer daba cuenta de una historia del primer fin de semana que dos niñas pasan con su padre, luego de la separación. Unos años después, en 1999, la escritora cordobesa Lilia Lardone Caballero negro – reeditada por Comunicarte el año pasado con ilustraciones de Claudia Degliuomini- ganadora del Premio Latinoamericano de LIJ Norma/Fundalectura, Bogotá en 1999.


En esta nouvelle, se narra la situación de Luciano, a partir de la crisis de pareja de sus padres y, su relación con su amigo Flaco que sufre las consecuencias en su familia del desempleo de su padre. Luciano, con las piezas de su rastri construye un castillo que lo lleva hacia otra realidad, hacia la imaginación, como forma de evadirse de la vida cotidiana que lo abruma. La construcción del castillo de rastri lo introduce en otro plano -y el relato se estructura a partir de allí en dos niveles de ficción- en el que inventa un amigo invisible, el caballero negro, y una historia de princesa raptada, rescatada y casada con quien venza un duelo de espadas. Un castillo que le permite a Luciano ir hacia otra realidad, en el sentido cortazariano, y volver transformado, dando cuenta, de algún modo, de lo que dice Nuala O’ Faolain, en el último libro de Michele Petit –Leer el mundo (FCE, 2015):  “Pareciera que los humanos necesitan ir hacia los otros una vez que se abre la puerta de la imaginación.”

La historia del caballero negro va ganando terreno en el relato y va configurando una historia que se teje con la historia de Luciano y el Flaco, realidad y ficción se van confundiendo para dar cuenta de cómo la imaginación nos permite reinventarnos e imaginar otros mundos posibles.

La reedición de Comunicarte permite rescatar un texto bien narrado y potente, y las ilustraciones de Degliuomini dan cuenta de los dos niveles de ficción con un juego de colores donde los grises acompañan el relato de la vida cotidiana y la paleta cálida nos lleva hacia el universo ficcional de Caballero Negro y sus hazañas.

Caballero negro es otra manera de pensar en cómo la literatura habla de un tema tan de moda actualmente cómo es las configuraciones familiares diversas.

¿Qué otros textos conocen donde se aborde el tema del divorcio o familias diversas?





jueves, 25 de junio de 2015

Esta vez un autoregalo: Encuentros y desencuentros en la gran ciudad

En una visita a la librería Rayuela, en La Plata, para descubrir algunas novedades de la LIJ, me autoregalé Vidas modernas de Ángeles Durini y Didi Grau (Del eclipse, 2014), que hacía tiempo que quería tener.



La historia de Xul y Rinoceronte podría ser la historia de tantas personas que viven en la gran ciudad, en el anonimato de la metrópolis o en la soledad del ruido urbano. Dos personas que se quieren, que viven sus propias vidas en su individualidad pero que por momentos se encuentran, se descubren y quieren compartir sus vidas.
Como cuenta Ángeles Durini, fue mirar la reproducción del cuadro Ciudad Lagui de Xul Solar y descubrir una historia para contar. Un cuadro de Xul, una imagen y la imaginación puesta a funcionar, a disparar historias posibles.

Azul  y celeste como colores predominantes y poesía en verso  para narrar la historia de una amistad entre Xul y el Rinoceronte en una gran ciudad, con enormes edificios, escaleras que se trepan al cielo, que suben y bajan, que llegan a destino o a ningún lugar. Cada uno vive en su apartamento y se visitan cuando tienen ganas, o se alejan cuando necesitan estar solos, se pierden en el laberinto de la noche o se refugian cada uno en su rulo. Dos amigos que se quieren y comparten la vida.



El texto poético de Durini nos traslada a una amistad tierna donde se da lugar al lenguaje coloquial pero también a las sutilezas e imágenes y las ilustraciones de Didi nos muestran un paisaje urbano de encuentros y desencuentros donde prevalece la doble página para contar esta historia, nutriéndose del cómic, el arte naif, la fotografía intervenida y cierto aire del arte de Xul Solar artista que ya Didi había tomado en su Mago Xul  (Calibroscopio, 2009)-.
Xul y Rinoceronte, Ángeles y Didi, diálogos en la gran ciudad. Una historia sencilla y tierna sobre la amistad.
Para conocer un poco más sobre este libro, visiten el blog de Didi:

lunes, 22 de junio de 2015

Semana de regalos: 5° cumpleaños del blog!



Esta semana el blog cumple cinco años y lo festejo reseñando libros que me regalaron y quiero compartir con ustedes, lxs que me siguen, me leen, comparten sus opiniones, lecturas y comentarios. Están ahí, del otro lado, sumando miradas para seguir sosteniendo este espacio de intercambio en torno a la literatura y la cultura con niñxs, para y con las infancias.

Hace un tiempo, mi amiga Natalia  estuvo en Colombia y como ya reseñé por acá, me trajo
algunos libros de regalo. En el fondo de la valija, después de terminar de ordenar sus libros, encontró otro que también estaba destinado para mí. Y finalmente llegó a destino.
Se trata de Ahí estabas de Claudia Rueda, editado por Oceáno en 2014 y ya en circulación también aquí en Argentina.


Ahí estabas es un libro álbum donde la materialidad de la escritura y la creación literaria
están en el centro de la escena. Apenas abrimos el libro y ya en las guardas nos encontramos con un lápiz que dibuja renglones en la hoja, como las líneas garabateadas en la portada. La escritura y el escribir o dibujar como práctica, como ejercicio o como posibilidad de lo imaginario. Una línea
inconclusa y pasar otra vez la página.

Un narrador en primera persona que le habla a un otro ausente al que interpela a partir de la evocación de distintos momentos de la vida. Situaciones donde el narrador se sintió solo, diferente, aislado, incómodo, distante. En aquellos momentos donde la tristeza lo invadió, o bien cuando las historias imaginarias lo acogieron y la literatura fue la oportunidad de dialogar con otrxs. Momentos donde ese otro, al que el narrador le habla, ha estado ahí, como compañero fiel.  La escritura o, mejor dicho, el corazón de grafito del lápiz que le/nos da la posibilidad de inventarnos y reinventarnos una y otra vez.

Ahi estabas de Claudia Rueda narra una historia sencilla a través de dobles páginas donde el narrador se hace presente en un dibujo sobre una goma de borrar y las situaciones de la vida se presentan en trazos apenas delineados, ligeramente esfumados, tenues, donde el color solo aparece para poner el acento en alguna situación. Imágenes en las que se entrama el dibujo y la fotografía, con una enorme sencillez se construye un diálogo entre discurso verbal y discurso visual, entre el yo que narra y el otro que acompaña, entre la autora y el/la lector/a.


Hermoso libro para pensar en la poesía de la escritura y las posibilidades que nos brinda, imaginar otro modo de habitar el mundo.  

martes, 2 de junio de 2015

Hallazgos de un día cualquiera XIII: Pedro el Desgreñado de Heinrich Hoffmann



El viernes 15 de mayo se realizó en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación la Feria de Editoriales independientes en la que participaron más de veinte expositores de distintas partes del país. Ese día iniciaba el dictado del seminario de posgrado “Infancias y literatura” por lo que recién a la tarde, cuando ya estaba cerrando la feria, pude acercarme a mirar un poco qué había quedado disponible. En el medio de los estands improvisados sobre cajas de madera en el pasillo de uno de los edificios de la facultad, me encontré con las exquisitas ediciones de Barba de abejas, editorial que publica libros en forma artesanal y con un cuidado trabajo estético y literario.  


Allí, en una pequeña caja, ya lista para ser embalada, quedaba un ejemplar de Der Struwwelpeter –Pedro el desgreñado- del médico y escritor alemán Heinrich Hoffmann. Este libro, como ustedes saben, lo traje de uno de mis últimos viajes a Alemania, en una edición facsimilar en alemán. Pero aquí estaba en castellano, con las ilustraciones originales del Dr. Hoffmann en la edición homenaje de Rütten & Loening de 1917, y en una delicada edición que incluía el texto en alemán, la traducción al inglés de Mark Twain y la traducción al español de Erich Schierloh.
Este libro ha sido traducido a muchísimos idiomas y es uno de los libros alemanes más conocido en todo el mundo. En cada una de las historias que se cuentan en este texto, distintos niños se portan mal, desobedecen a sus padres y son castigados por ello, en algunos casos con castigos ejemplares y extremos. La intención que tenía este texto que Hoffmann escribió pensando en sus hijos era claramente didactizante. En ese sentido, las ilustraciones acompañan el texto reforzando esa dimensión pedagógica y didáctica de cada relato.


Por ejemplo, “La historia de Chupadedos” cuenta cómo Conrado desobedece todo el tiempo a su madre en cuanto a no chuparse los dedos, entonces es castigado por un sastre que con grandes tijeras le corta los dedos.
Der Struwwelpeter o Pedro el Desgreñado en esta bella edición es un libro para atesorar cuidadosamente –para ello la edición viene en una bolsa con ziploc para protegerlo- y disfrutar de estas historias didácticas desopilantes por lo extremas.
Para conocer un poco más de esta editorial independiente pueden linkear Facebook.com/barbadeabejas

Nos seguimos leyendo en una pausa entre las múltiples actividades que estoy teniendo por esta época. 

jueves, 23 de abril de 2015

Abierta la inscripción: Lectura, escritura y sexualidades

Hola a todas/os: comparto la información de un curso para docentes de escuelas secundarias -aspirantes, docentes en ejercicio y estudiantes avanzados- de Prácticas del Lenguaje y Literatura que estaré dictando con dos compañeros en el marco del Programa Nacional de Formación Permanente Nuestra Escuela titulado "Lectura, escritura y sexualidades en las clases de Prácticas del Lenguaje y Literatura en la escuela secundaria" con sede en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata. Es un curso gratuito y con puntaje docente.
Se reprogramó el inicio para el sábado 9 de mayo. 
En este curso trabajaremos con textos de autoras como María Teresa Andruetto, Silvina Ocampo, Liliana Heker, entre otras, desde una perspectiva de género y propondremos cómo abordarlos en el aula.
Para inscribirse, completar el formulario on line:
http://nuestraescuela.educacion.gov.ar/lectura-escritura-y-sexualidades-2/




lunes, 20 de abril de 2015

Una muestra para visitar: recordando a Barnes y Dourmec


Hace unos días estuve de visita en la muestra “Tal para cual. Libros y obras de Ayax Barnes y Beatriz Dourmec en el Museo del libro y de la lengua de la Biblioteca Nacional (Av. Las Heras 2555, Ciudad de Buenos Aires).
Apenas entrar en el hall del museo, una línea roja te invita a hacer un recorrido por el espacio, una línea roja que es La línea, un libro de Ayax Barnes y Beatriz Dourmec, ilustrador y autora que idearon este libro revolucionario para niños/as y que los llevó a tener que exilarse primero en Italia y luego en España.

También está la posibilidad de jugar a armar y desarmar los dibujos que inventó Ayax –o Pacho como lo conocían sus amigos- en rompecabezas de piezas grandes o pintar el pueblo que no quería ser gris en unas mesas de colores, en el espacio de la planta baja.

Si subimos las escaleras, en el segundo piso nos encontramos con el maravilloso mundo de estos dos creadores a través de vitrinas con los libros que fueron publicando aquí y allá como Cómo nacen los niños, Un cuento muy blanco, Aserrín, Aserrán; Tal para cual, Bichito y la flor, entre otros. Además de libros también encontramos juguetes que inventaron cuando tenían que vivir en el exilio. Y, en grandes láminas de colores que cuelgan del techo vamos conociendo sus pensamientos o sus ideas sobre la literatura y la vida.



Al fondo, un mural colorido con las ilustraciones de El país que no quería ser gris, otro de los libros que fue censurado.

Una muestra interesante por el rescate de dos grandes de la literatura para niñ@s argentina como modo de construir memoria y hacer una historia de nuestra literatura.

No puedo dejar de hacer mención al catálogo de la muestra con textos de distintos especialistas, y los recuerdos de amigos de Ayax y Beatriz que tuvieron el gusto de conocerlos, con ilustraciones y fotos.



Un paseo para hacer uno de estos fines de semana. La muestra está hasta abierta al público hasta julio. 

martes, 31 de marzo de 2015

Un niño desde trece miradas

Un texto que dispara otro texto, la historia de la literatura y de las influencias literarias entre autores y autoras es, de algún modo, la historia que está por detrás de Trece modos de mirar a un niño de María Teresa Andruetto y Cecilia Afonso Esteves (Comunicarte, 2014).


Fotografía de Cecilia Afonso Esteves en su blog : http://unlagodepapel.tumblr.com/



Trece modos de mirar a un niño es un homenaje a Trece modos de mirar un mirlo texto poético del autor norteamericano Wallace Stevens que, confiesa Andruetto, es un texto que la acompaña desde siempre.
Un poema en espejo de otro poema, palabras que se cruzan para reapropiarse de la literatura y construir otro texto, tráfico de poesía que trae nueva poesía y nuevas imágenes a partir de un hipotexto entrañable y potente poéticamente. De eso, tal vez, se trate esta operación literaria que construye Andruetto con las delicadas ilustraciones de Afonso Esteves.

Pero Trece modos de mirar a un niño es mucho más que eso. Es la historia de un niño desde distintas perspectivas, desde distintos modos de ver que lo colocan en el centro y construyen, a partir de allí, diversas concepciones de niño y de infancia. Los ojos de un niño que miran más allá del paisaje, tres niños como tres voces únicas y distintas, un niño como anécdota de un relato, un niño en el universo familiar, la belleza triste del llanto de un niño, la sombra de un niño que trae un “dolor indescifrable”,  un niño ausente a la mirada del otro, un niño que trae conocimiento, un niño perdido, un niño viajero, un niño dormido y otros niños que andan por ahí, en este relato sensible, pequeño como pinceladas que llegan al corazón de quien lee.  

Trece modos de mirar a un niño de María Teresa Andruetto y Cecilia Afonso Esteves es un encuentro con la poesía y con la posibilidad de descubrir cómo el lenguaje puede construir belleza.




jueves, 26 de marzo de 2015

Libros del mundo VII: desde México


Tener la experiencia de leer Migrar de José Manuel Mateo con ilustraciones en papel amate de Javier Martínez Pedro, editado por Tecolote en 2011, es vivir, de algún modo, o al menos acercarse, a la experiencia difícil y traumática de la migración de niños/as y familias de México hacia EEUU en busca de una vida mejor.  Leer este libro de bellísima y cuidada factura es otro modo de conocer la experiencia de la migración en contextos donde la violencia, el hambre y la persecución hacen que la única salida sea tratar de llegar al otro lado de la frontera. Sí, la única salida, como dice Alma GuillermoPrieto en el artículo recientemente publicado en Review. Revista de Libros (marzo-abril 2015) titulado “México la muerte de la juventud” refiriéndose a la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.

Migrar es un libro desplegable  que a medida que vamos abriéndolo en orientación vertical va mostrando escenas en un estilo abigarrado y detallista que dialogan con el texto de Mateo en el que el autor relata las vicisitudes de un niño que juega entre “gallos y cochinos” en un pueblo campesino donde no había corrales, su padre cultivaba la tierra ajena y él jugaba con su hermana entre las palmeras. Pero, de un día para otro, todo cambia. Empieza a faltar el trabajo, los varones de las familias deben migrar y las madres con sus niños y niñas se quedan solas en el pueblo. Y, a partir de allí, la escasez de alimentos, la falta de trabajo y la necesidad de buscar nuevos rumbos. Colgarse de un tren, esconderse en la noche de los traficantes de personas  y la policía, la llegada al otro lado de la frontera y un nuevo mundo que se abre ante los ojos del niño. Pero, también, saber que se es extranjero y que su casa está muy lejos.

Las imágenes en blanco y negro dibujadas en papel amate -papel vegetal de larga tradición en el pueblo Xalitla de donde es originario el ilustrador Martínez Pedro-  muestran las situaciones que vive el niño y su madre en una extensa superficie de papel que se va llenando de mini escenas que lxs lectorxs vamos descubriendo y redescubriendo cada vez que Migrar se vuelve a desplegar. Del campo a la gran ciudad, de la noche estrellada y las casas campesinas a una ciudad siempre iluminada con grandes edificios y miles de autos. La portada en negro como marco a la imagen en papel amate blanco y negro y las cintas negras que lo cierran por detrás, en un formato apaisado, dan solemnidad y, de algún modo, nos preparan para esta historia oscura en la vida de un niño.

Migrar es un libro que narra desde la mirada del niño migrante una aventura llena de peligros, desprotección, violencia y desesperación, aventura que miles de niños y niñas hacen todos los días para escapar de la situación difícil que se vive en México. Un libro para tomar conciencia y contar una historia dura a través del arte.

Este libro ganó el Premio Nuevos Horizontes 2012 de la Feria Internacional del Libro infantil y Juvenil de Bolinia y el Premio Antonio García Cubas de la Feria del libro de Antropología e  Historia de México y generó mucho interés en México, como da cuenta el artículo de la escritora mexicana Elena Poniatowska sobre este libro publicada en el diario La Jornada el 4 de diciembre de 2011: http://www.jornada.unam.mx/2011/12/04/opinion/a04a1cul


¿Qué otros libros conocen sobre la experiencia de la migración? 

viernes, 13 de marzo de 2015

Cartas a Duncan


Sabemos mucho acerca de cómo los/as artistas trabajan en sus talleres, cómo se imaginan el mundo a través de su arte, cómo se dejan influir y cómo se distancian de sus influencias artísticas, qué materiales prefieren usar y cómo les gusta mostrar sus creaciones. Pero ¿cuánto sabemos acerca de lo que sienten los materiales con los que esos artistas trabajan? ¿Qué pensará ese lápiz diminuto que llevo en mi cartuchera para dibujar o escribir cuando tengo ganas?

Drew Daywalt se anima a inventar una historia donde los crayones son los protagonistas y Oliver Jeffers imagina el relato de estos crayones quejosos a través de sus mágicas ilustraciones en El día que los crayones renunciaron (FCE, 2014).

La historia se inicia cuando Duncan, el niño de esta historia, descubre un montón de cartas cuando en la escuela va a usar sus crayones. A partir de ahí el relato se construye con la inclusión de las cartas que cada crayón de su caja le envía a Duncan contándole cómo se siente y haciéndole distintos pedidos. 

A medida que avanzamos la lectura, vamos conociendo las cartas que le enviaron los crayones a Duncan y, lo interesante es que hay un uso de la doble página para presentar en una página las cartas escritas por los distintos crayones con la grafía de Jeffers –nos preguntábamos con Natalia, quien me prestó este libro, cómo habrán hecho para imitar su escritura en la edición en español- y en la otra los dibujos que hizo Duncan con el crayón de cada color. Por ejemplo, por nombrar solo algunos, el crayón rojo le escribe que está cansado de trabajar tanto porque siempre lo usa para pintar camiones, bomberos, manzanas, Papá Noel, corazones, etc. y está muy gastado; el violeta le reclama que aprenda a pintar dentro de las líneas porque se está volviendo loco; el color beige se queja de que no sepa cuál es su verdadera identidad y que lo deje de lado para pintar; el gris le pide que no pinte tantos animales grandes como elefantes y ballenas porque se cansa de hacerlo solo; o el Rosa que le reclama por qué no lo usa, que no es solo un color para pintar princesas. Asimismo, en algunas dobles páginas, nos encontramos con la carta y en la otra página con la imagen de un libro para colorear o con una hoja dibujada o con la imagen del crayón de acuerdo a cómo se siente en ese momento.

El cierre del relato es una apuesta a la imaginación y la creatividad de Duncan que tiene en cuenta los pedidos de los crayones.

El día que los crayones renunciaron de Drew Daywalt y Oliver Jeffers nos invita a ponernos del otro lado, a mirar cómo los materiales para el dibujo y la escritura pueden sentir y pensar el hecho creativo desde sus propias experiencias y sentimientos.


¿Alguna vez te preguntaste qué pensara que usás para escribir tus ideas o el lápiz que te traslada a mundos imaginarios?