viernes, 17 de abril de 2020

Desde la mirada de una niña


Abrir la primera página de un libro y encontrarme con el recuerdo entrañable de Leopoldo Brizuela, lector de literatura, es un pequeño placer como lectora: “Llegué a Mavis Gallant gracias a Leopoldo Brizuela” dice Inés Garland en el prólogo del delicioso descubrimiento de Los cuentos de Linnet Muir de la escritora canadiense Mavis Gallant editados por Eterna Cadencia (2019) y seleccionados y traducidos por Garland.


Nunca había escuchado hablar de esta autora canadiense, a pesar de ser una ferviente lectora de escritoras mujeres y fiel seguidora, desde hace muchos años, de Alice Munro y Margaret Atwood, tal vez las escritoras más conocidas de este país.

Estos cuentos nos acercan una serie autobiográfica  donde la escritora ficcionaliza episodios de su infancia y juventud en Montreal durante la primera mitad del siglo XX desde la mirada de una niña y, luego, una joven, que descubre la desigualdad femenina en ese contexto sociohistórico y las dificultades de las mujeres para acceder al trabajo, la educación y la libertad.
Si bien no se trata de un libro para niñxs, es muy interesante cómo la autora relata las distintas historias que presenta desde la mirada sensible de una niña que va develando las capas sociales que ocultan situaciones de violencia hacia las mujeres, de desigualdad sexo-genérica, de subalternidad y opresión de las mujeres en la sociedad de la época.

“Ninguna infancia es inmune a la perturbación. Hay un temblor bajo los pies cuando un adulto en el que confiamos dice una cosa y hace otra. La reacción universal de un niño es decir ‘no es justo’. La pobre respuesta de ‘la vida no es justa’ no hace nada para restaurar el orden.”

“Voces perdidas en la nieve” narra desde la mirada de una niña cómo era la educación de las infancias en la época de entreguerras y, especialmente, la educación de las niñas. ¿Qué podían o no hacer las mujeres? ¿Qué saberes y experiencias tenían que tener antes de llegar a la vida adulta?
“El doctor” presenta al personaje de un médico desde la mirada de una niña que ausculta su comportamiento, su manera de vincularse con lxs pacientes y, especialmente, el vínculo que estable con ella. Dice la narradora: “Las mujeres son pacientes supuestamente peligrosas para los jóvenes doctores; las niñas perdidamente enamoradas deben ser peores.”

Y, para mí, el mejor cuento del libro: “En la juventud está el placer” en el que se narra la búsqueda de independencia económica de una joven luego de quedar desamparada. ¿Qué experiencias y obstáculos atraviesa en la sociedad patriarcal de la época? ¿Qué implica descubrir la posibilidad de sentir y experimentar sensaciones nuevas? ¿Qué desafíos le presenta la sociedad de la época?

En los otros relatos que conforman el volumen aparece la práctica de la escritura como espacio propio para las mujeres de la época como así también la reproducción de los estereotipos de género y las dificultades de vivir a contrapelo de lo instituido.

Los cuentos de Linnet Muir de Mavis Gallant son de una potente actualidad y muestran la mirada atenta de la escritora para contarnos historias que nos hablan de lo que nos pasa, de los deseos, las frustraciones, los roles impuestos y los proyectos de un futuro más igualitario.



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