Otro año y otra visita a la Feria del Libro Infantil y Juvenil en la sede del Centro Cultural Kirchner. Poca gente, pocxs niñxs y poca venta, lamentablemente, en los estands. Tal vez por el horario de mi recorrido, tal vez por el costo de los libros y los bolsillos flacos.
Este año mi recorrido estuvo orientado a conseguir algunos clásicos que en algún momento tuve y perdí, o que siempre quise tener, o dejarme sorprender por alguna propuesta estética diferente.
El recorrido empezó, como siempre, en el estand de Colihue donde los clásicos y rescates literarios abundan. Ahí encontré muchas ofertas como, por ejemplo, los Libros del Malabarista 3 x $215.
Seguí mi recorrido, y unos pasos más allá, en Loqueleo en los anaqueles debajo de las mesas, me encontré con ofertas de los libros de Alfaguara infantil a 2 x $165, 2 x $175 y 2 x $185.
En Random House, finalmente estaba Miedo de Graciela Beatriz Cabal reeditado el año pasado -que conseguí a solo $161 y que era uno de los que quería. Pegado a algunos clásicos de Cabal, estaban los de María Elena Walsh entre $200 y $400.
Unos pasos más allá, en el estand Libro que te quiero libro,
encontré otra joya del artista plástico e ilustrador mexicano Gabriel Pacheco, el mismo de No, no y no , pero en este caso Los poemas de Federico García Lorca (Kalandraka, 2015) a menos de $300. Ahí también estaba una belleza en libro titulado Bola de agua que compré hace unos años en Bogotá y reseñé acá.
Y, como todos los años, me di una vuelta por Calibroscopio y allí encontré el otro clásico que buscaba hacía tiempo: Pluma de ganso (Babel, 2012) de Nilma Lacerda, una historia de apropiación de la escritura. Mirando y mirando, descubrí, también de la misma editorial, el nuevo libro de María Teresa Andruetto y Daniel Rabanal, Los ahogados, una historia contada a cuatro manos, entre imágenes y discurso verbal, sobre la desaparición forzada de personas, a $250.
Los cuatro libros que me llevé a mi casa y, así, termina esta historia la 27° Feria del libro Infantil y Juvenil de Buenos Aires.
Ahora, ¡a leer!
De los cuatro me intriga Pluma de ganso. Quizá una reseña.
ResponderEliminarYo anduve comprando libros de Isol que también los firmó y me resultó interesante ver como plasmó sus dibujos en las dedicatorias.
Sí, claro, más adelante habrá reseña.
ResponderEliminarQué bueno que conseguiste los libros de Isol y firmados!
Pude ir ayer a la feria del libro y, como vos, desembarqué primero en Colihue para aprovechar el descuento del 40% de todos los años y así recuperar algunos títulos y obtener otros que nunca tuve de la colección Los libros de Boris, como: Voces de infancia. Poesía argentina para los chicos, compilado por María de los Ángeles Serrano; El gallo Pinto y otros poemas y Los sueños del sapo, de Javier Villafañe. Después fui derecho a Comunicarte y allí compré 3x2 a $350 de la colección Bicho bolita: Encantado, dijo el sapo, de María Cristina Ramos; Con el paso del tiempo, de José Sanabria y Un barco muy pirata, de Gustavo Roldán, para regalar. También pasé por Loqueleo a ver si había descuento en los 6 libros de Graciela Montes para los más pequeños reeditados en rústica el año pasado (El paraguas del mago, Juanito y la luna, Tres chicos muy valientes, La pipa del abuelo, El auto de Anastasio y El globo azul), y me llevé la sorpresa de la reedición en cartoné de otros 4 títulos también de fines de los '80: Flor de nena, Un poquito de arcoíris, la valija de doña María y Buenas noches. Por último, me dejé un premio para el final: sabía que Calibroscopio había reeditado Mi gatito es el más bestia, de Gilles Bachelet, editado por Del Nuevo extremo, que hacía años lo estaba esperando; ahora se llama Mi gato, el más bestia del mundo. ¡Estoy feliz!
ResponderEliminarBesos,
Natalia.