En nuestro oficio de enseñar las satisfacciones se construyen
con trabajo y dedicación, con militancia y pasión por enseñar, por abrir
puertas, tender puentes, estar atentxs, escuchar a lxs otrxs, aprender. Es un
oficio artesanal, que se elabora detalladamente, con paciencia y ganas. Cuántas
veces nos encontramos con estudiantes de años pasados que nos recuerdan sus
experiencias de aprendizaje con nosotrxs o cuántas veces recordamos estudiantes
y vivencias que compartimos a lo largo de nuestra trayectoria profesional.
Pero, también, cuántas veces sentimos que todo está perdido,
que no tenemos fuerzas, que las decepciones nos golpean, que no tenemos tiempo
para nada, que no sabemos cómo seguir adelante. Para estos momentos de
desasosiego nada mejor que regalarnos la lectura de Selma (FCE, 2012) de Jutta
Bauer.
Selma es la historia de una oveja del mismo
nombre que sabe cuál es la clave para estar bien y ser feliz: “comer un poco de
hierba”, “hablar con los niños”, “hacer algo de ejercicio”, “comer”, “platicar
con la señora Meyer”, y “dormir profunda y plácidamente.” Una lección de vida
que, creo, podemos aprender.
Para conocer un poco más acerca de Jutta Bauer y su obra,
pueden leer la entrevista que le hizo la revista Babar: http://revistababar.com/wp/entrevista-a-jutta-bauer/
¡Feliz día para todxs lxs maestrxs!
Besos,
Val
Muchas gracias!!!!
ResponderEliminarGracias por tu entrada! Trataré de conseguirlo e indagar mis dudas! Es un placer compartir Poéticas de la Infancia. Saludos! Elena.
ResponderEliminarGracias, Vale... Igualmente para vos y l@s docentes que te leen!
ResponderEliminarBesos:>
Gracias por leerme y sus comentarios!
ResponderEliminar¡Muy feliz día atrasado para vos también, Vale! ¡Me encantó el regalo de esa bella historia que es Selma que hace poquito adquirí y disfruté mucho de la entrevista a Jutta Bauer en Babar! Guardo con mucho cariño una nota que le hicieron a ella y que salió el año pasado en el suplemento adn de La Nación en la cual también se incluye su discurso de aceptación al premio Hans Christian Andersen.
ResponderEliminarUn beso,
Nati.
Gracias, Nati! La nota de la que hablás no la conozco, la voy a rastrear.
ResponderEliminarContá con ella. Te llevaré una copia cuando nos veamos.
ResponderEliminarBesos.
Gracias! besos,
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