lunes, 20 de agosto de 2012

Tercera entrega: Espacio Binette Schroeder

Otro espacio que visité en el Schloss Blutenburg es el Binette Schroeder Kabinett, donde está reunida la obra de esta escritora e ilustradora alemana.
Binette Schroeder nació en Hamburgo en 1939 y pasó su niñez en Garmisch-Partenkirchen. En 1956 se mudó con su familia a Munich, ciudad donde estudió dibujo publicitario, una profesión que continuó a partir de 1962 en la Escuela Superior de Diseño de Basilea (Suiza). Paralelamente se dedicó a la tipografía, fotografía y litografía. Después de graduarse, trabajó de forma independiente como diseñadora y fotógrafa. Con Lupinchen (Lupincito) logró en 1969 su salto artístico. Su obra completa fue premiada en 1997 con el Premio Alemán de Literatura Juvenil y en el 2004 con el Gran Premio de la Academia Alemana de Literatura Infantil y Juvenil Volkach (1980). Hoy vive en Munich y trabaja como ilustradora, pintora y fotógrafa.
La visita al espacio dedicado a Binette Schroeder es una caja de sorpresas. En la escalera que sube hacia esa sala nos encontramos con una serpiente y nos recibe un pájaro colgado del techo.



Apenas entramos, se ilumina la sala y descubrimos un mundo maravilloso, con estantes donde habitan ejemplares de la obra de Binette y objetos y muñecos que remiten a su mundo de fantasía.





Una puerta nos sumerge en un universo imaginario



Y en el otro saloncito, encontramos libros de su autoría expuestos en anaqueles, mesas y vitrinas.






Un espacio para imaginar, conocer una artista impresionante y escapar, aunque sea por un rato, de la realidad.
Espero que disfruten de este post, besos,
Val


domingo, 12 de agosto de 2012

Segunda entrega: visita al Museo Michael Ende

Uno de los espacios para visitar en el Schloss Blutenburg es el museo en homenaje a Michael Ende, el escritor alemán ya considerado un clásico de la literatura para niños, que se fundó en 1998. Luego de visitar la biblioteca para niños, donde varios anaqueles están dedicados a las obras de Ende como Momo, La historia sin fin, El ponche de los deseos, Espejo en el espejo, entre otros,



nos acercamos al museo que está en la segunda planta del mismo edificio.
Se trata de una sala donde se encuentran objetos personales del escritor, recuerdos de viajes, ediciones de sus libros, muebles, marionetas, juguetes, obras pictóricas de su padre Edgard Ende, y manuscritos que Ende donó cuando regresó a Munich, luego de su estancia en Genzano (Italia), y se hizo habitué de la biblioteca.
Recuerdos y objetos personales
En una mesa, iluminada por el sol que entra por las ventanas, el visitante puede mirar y explorar ediciones de sus libros en alemán y en más de 40 idiomas.

El recorrido se hizo más ameno gracias al señor que se encarga de recibir a los visitantes y amablemente nos fue contando y presentando el recorrido por la sala. Cuando supo que éramos argentinos, nos mostró algunas ediciones en español de la obra de Ende y se interesó por saber si sus libros se conseguían acá. También nos contó que Mariko Sato, su última mujer, fue la traductora  de sus libros al japonés y promotora de su literatura en ese país oriental. Además, nos enteramos que Ende hizo un libreto de su libro Momo para ópera que se estrenó en 1978 con música de Mark Lothar, curiosidad por mí desconocida sobre la producción de Ende.
La visita fue otro modo de redescubrir a Michael Ende y valió la pena.
Hasta la próxima entrega, besos,
Val

domingo, 5 de agosto de 2012

Primera entrega: el Schloss Bluntenburg

Después de un mes sin escribir y un viaje de por medio, retomo el diálogo. Como hago habitualmente después de un viaje, en los próximos post les voy a ir contando algunos paseos, hallazgos y sorpresas vinculados con nuestro común interés por la literatura y cultura para niños. En este caso, estuve en Alemania, en Munich y alrededores.
Un hermoso día de sol, salimos del centro de Munich hacia el Schloss Blutenburg, sede de la Internationalen Jugendbibliotek, es decir, la Biblioteca Internacional de Literatura infantil y juvenil que es un centro de investigación, una biblioteca para niños y una institución que asigna el prestigioso premio White Ravens. Más allá del interés particular por conocer el lugar por la relación con el campo de la literatura para niños, es un paseo que vale la pena por su belleza.


El castillo está enmarcado por un parque enorme, donde se puede caminar, andar en bicicleta o disfrutar del sol y la naturaleza al lado del lago.También se puede visitar la capilla donde habitualmente se realizan conciertos.



En el castillo, además del centro de investigación y la biblioteca se puede visitar el Museo de Michael Ende, el Espacio Binette-Schroeder -que presentaré en las próximas entregas- y el Espacio Jutta Richter -que lamentablemente estaba cerrado cuando fui de visita.


Biblbioteca para niños, organizada por los países de origen de los escritores que se encuentran en el catálogo

Escultura que da la bienvenida al Espacio Jutta Richter


Instalación con los nobmres de los escritores e ilustradores que participan del Festival White Ravens
El Schloss Blutenburg es una primera muestra de este viaje por el país germano. Un paseo para redescubrir la obra de un autor como Michael Ende, conocer el mundo de la ilustración de Binette Schroeder, saber un poco más sobre el premio White Ravens y dejarse sorprender por la relación entre cultura y naturaleza tan característica de Munich y sus alrededores.   Espero que les guste esta primera entrega.
Besos,
Val